En un post anterior (te dejo el link aquí: >>>Parte 1<<<), repasamos las partes más importantes de la cadena de audio. Pero ahora surge la gran pregunta: ¿cómo se arma esta cadena?
No me refiero simplemente a conectar cables (aunque eso también es clave), sino a entender cómo combinar los elementos que necesitamos. Como mencionamos antes, muchas de las partes esenciales ya vienen integradas dentro de otros componentes. Esto significa que podríamos no necesitar todo desde el principio y, además, podemos ensamblar nuestra cadena de distintas maneras.
Partiremos por las configuraciones más simples, ideales para quienes recién comienzan, y veremos cómo mejorar y ampliar la cadena a medida que nuestro oído lo exija... y el presupuesto lo permita.
Primero, exploraremos las configuraciones para un tocadiscos. Luego, para no generar confusión (aunque el concepto es el mismo), abordaremos las cadenas para música digital en todas sus formas.
Y para cerrar el círculo, hablaremos de ecualizadores, esos elementos que permiten darle el toque final y personal a nuestra experiencia auditiva.
tocadiscos y parlantes
Vamos con lo más básico
Mis opciones favoritas (y las que estoy usando ahora)
Esta es, personalmente, la configuración que más me gusta y que sigo usando hasta el día de hoy. ¿Por qué? Porque para dar el siguiente salto en calidad, el presupuesto se dispara bastante. Además, todavía puedo mejorar algunas partes de mi sistema actual, como cambiar la aguja del tocadiscos, sin necesidad de agregar nada extra, ni rehacer toda la configuración.
En esta etapa, ya hemos agregado un preamplificador a la ecuación, pero el resto de la cadena sigue igual. Como mencioné antes, los tocadiscos con preamplificador incorporado suelen tener una perilla para desactivarlo. Entonces, basta con desactivar esa función y comprar un preamplificador externo para dar un buen salto en calidad.
Lo genial de incluir un preamplificador independiente es que ahora puedes mirar tocadiscos más avanzados, con funciones que los modelos de entrada no ofrecen: cápsulas intercambiables, contrapesos ajustables, sistemas anti-skating, entre otros. (Prometo que un día le dedicamos un post completo a todos estos detalles sobre los tocadiscos).
¿Y los parlantes? Por ahora, seguimos con los activos. Siguen siendo una excelente opción por precio y facilidad.
Abajo te dejo tres recomendaciones de preamplificadores phono para distintos presupuestos. También incluí tres tocadiscos de gama más alta que los anteriores, ya sin preamplificador incorporado, para que puedas dar el siguiente paso en tu cadena de audio. Yo mismo estoy pensando en cambiar mi preamplificador pronto... ¡ahí les cuento cómo me va!
Tocadiscos con amplificador y parlantes pasivos
¿Y si damos el gran salto?
Como te habrás dado cuenta, otra vez no aparece el preamplificador phono. Pero, como mencioné antes, este puede venir integrado en el tocadiscos o en el amplificador. Si ya comenzaste con una cadena más sencilla, este paso es un upgrade importante.
¿Por qué? Porque además de adquirir un amplificador, también deberás cambiar los parlantes activos por parlantes pasivos. Aunque técnicamente puedes conectar parlantes activos a un amplificador, no es nada recomendable. Esto puede generar interferencias, residuos en la señal e incluso, si haces las conexiones mal, podrías llegar a dañar los parlantes.
Sobre los amplificadores, hay muchísimo para explorar. Encontrarás modelos con entradas para línea de audio, auxiliares (para conectar dispositivos como reproductores MP3), entradas ópticas (perfectas para televisores) y algunas otras. Además, muchos incluyen salidas balanceadas para audífonos, un extra genial si también disfrutas de escuchar música con cascos.
En cuanto a los parlantes pasivos, aquí el mejor consejo que puedo darte es que los pruebes antes de comprar. Sus características físicas (como el tamaño de los drivers o el material de la caja) influyen bastante en el sonido, y tus oídos son los mejores jueces.
Si estás en Chile, te recomiendo pasar por la tienda Needle Vinilos. Yo he hecho todas mis compras grandes ahí, y siempre me han asesorado de maravilla. Son unos verdaderos expertos en audio.
Como siempre, abajo te dejo tres opciones de amplificadores y parlantes pasivos para distintos presupuestos. Así puedes ir explorando este salto en calidad que, créeme, vale totalmente la pena.
Tocadiscos, preamplificador, amplificador y parlantes pasivos
Por supuesto, esta es la opción menos económica, pero si tienes el presupuesto, es la más recomendable. No solo por la calidad de sonido, sino porque siempre encontrarás algo que mejorar. Y lo mejor es que, al tratarse de equipos de gama alta, si algún día decides vender una pieza para cambiarla por otra mejor, seguramente será muy fácil encontrar interesados.
Esta configuración es básicamente la combinación de todo lo que hemos hablado hasta ahora: tocadiscos, preamplificador, amplificador y parlantes pasivos, cada uno en su lugar. No hay mucho más que agregar, salvo que esta es la cúspide para cualquier amante del audio.
Así que si estás listo para dar este salto, ¡adelante! La recompensa es un sonido que realmente hace justicia a tu música favorita.
y los cables?
Acabo de darme cuenta de algo súper importante: no hemos hablado de los cables. La verdad, esto debería haber estado en la primera parte del post, pero no voy a hacer que vuelvan a buscarlo. Así que lo dejaré aquí también. Si ya lo leyeron allá, pueden saltarse esta parte porque, sí, es un copy-paste.
A menudo pasamos por alto los cables, pero son clave. No tiene sentido gastarnos un dineral en equipos si luego perdemos calidad usando cualquier cable barato. Los cables son fundamentales para mantener el sonido tal como queremos escucharlo.
Por lo general, usamos los típicos RCA no balanceados (los de dos colores: blanco y rojo). Sin embargo, hay detalles importantes a considerar:
Materiales:
- El cobre libre de oxígeno (OFC) es ideal porque reduce las pérdidas de señal.
- La plata o el cobre chapado en plata son incluso mejores, especialmente para una transmisión más limpia en las frecuencias altas.
Aislamiento:
- Busca cables con varias capas de aislamiento para minimizar las interferencias electromagnéticas.
Conectores:
- Los chapados en oro son los mejores porque resisten la corrosión y aseguran una buena conexión.
Reproductor con parlantes activos
Ahora vamos con la música digital
Como mencioné antes, usar música digital es similar a usar un tocadiscos, pero aquí nos ahorramos el preamplificador. Cuando hablamos de un reproductor, puede ser muchas cosas: un reproductor de CD, un streamer dedicado o incluso tu celular. Sí, ¡tu celular conectado a unos parlantes activos ya cuenta como una cadena completa!
Dicho esto, mi recomendación es buscar dispositivos que incluyan una buena tarjeta de sonido integrada. Esto marcará una gran diferencia en la calidad de audio, especialmente si usas servicios de streaming Hi-Res o archivos de alta calidad como FLAC.
Ahora, si lo que buscas es la mejor calidad posible, mi apuesta siempre será por los CDs. Su sonido es más consistente, sin depender de conexiones o calidad de red, y además, no hay nada como tener tu música favorita en formato físico. Es algo especial.
Reproductor con amplificador y parlantes pasivos
Volvemos a lo mismo: la combinación ganadora
La combinación de parlantes pasivos con un amplificador independiente siempre será nuestro norte. ¿Por qué? Porque un buen amplificador no solo te da una calidad de sonido increíble, sino que también te permite experimentar con una variedad de parlantes.
La conexión aquí sigue siendo la misma que hemos mencionado antes: conectas tu reproductor al amplificador, y este va directo a los parlantes pasivos. Simple, pero muy efectivo.
No tengo mucho más que agregar, porque ya he destacado varias veces lo mucho que un buen amplificador puede transformar tu sonido. Así que, si tienes la oportunidad de dar este salto, no lo dudes. Te aseguro que no te arrepentirás.
ecualizadores
¿Vale la pena hablar de ecualizadores?
Cuando empecé a escribir sobre este tema, tuve mis dudas. Los ecualizadores son equipos fascinantes, pero también complicados. Aunque en el pasado eran bastante comunes en las cadenas de audio, hoy en día casi no se usan en sistemas Hi-Fi modernos, al punto de que prácticamente ya no se fabrican para este propósito. Su terreno ahora es más el de los estudios de grabación que el de nuestras salas de estar.
¿Para qué sirven? Básicamente, los ecualizadores te permiten ajustar la intensidad de diferentes frecuencias de sonido. Puedes "colorear" el sonido según tus gustos, lo que suena atractivo, pero también es fácil arruinarlo y terminar con algo peor que al principio.
Yo, en lo personal, no los recomiendo. Mi objetivo al escuchar música es captar el sonido más fiel posible, tal como el artista lo grabó. Para mí, intentar colorearlo va un poco en contra de esa idea. Eso sí, reconozco que tienen una utilidad importante: corregir problemas acústicos en la sala donde escuchamos música. Sin embargo, incluso para eso pueden ser difíciles de usar correctamente.
Eso sí, reconozco que tienen una utilidad importante: corregir problemas acústicos en la sala donde escuchamos música. Sin embargo, incluso para eso pueden ser difíciles de usar correctamente.
Si decides aventurarte, hay dos tipos principales:
- Ecualizadores gráficos: Son los clásicos con varias perillas o deslizadores que ajustan bandas de frecuencia específicas.
- Ecualizadores paramétricos: Más avanzados, te permiten ajustar no solo la banda principal, sino también influir en las frecuencias cercanas. Estos son los más comunes hoy en día, aunque están pensados principalmente para estudios de grabación.
En resumen, no son un equipo indispensable para un sistema Hi-Fi, pero si te interesa experimentar o necesitas corregir la acústica de tu espacio, podrían ser una herramienta interesante. Eso sí, úsalos con cuidado y paciencia.
Y con esto llegamos al final
¡Uf! Con esto damos por terminado este larguísimo post. Al final creo que el único tema que nos quedó pendiente fueron los audífonos. Pero, siendo honesto, creo que mejor los dejamos para un post aparte, porque es un tema largo y va por un camino distinto al de las cadenas de audio.
Así que, eso sería todo por ahora en este recorrido técnico. Espero que les haya sido útil y que, si están armando su sistema o pensando en mejorarlo, este post les dé una buena guía para seguir avanzando.
¡Nos leemos pronto! Saludos.